
España está considerado como uno de los países donde existe mayor tráfico de ciclistas en la modalidad deportiva. De hecho, es el medio más económico, permite una mayor movilidad en trayectos cortos, no contamina y no tiene problemas de estacionamiento, entre otras ventajas.
Sin embargo, no todo es tan bonito, puesto que son muchos los accidentes en los que se ven involucrados los ciclistas, ya sea por accidentes, atropellos o por muerte natural. Es, de hecho, una de las tareas en las que se está trabajando desde hace años en España: la convivencia entre vehículos y ciclistas.
1,5 metros de vida
Se ha establecido la obligación de mantener una distancia de seguridad mínima de 1,5 metros entre vehículo y ciclista. De hecho, no respetar esta normativa equivale a una falta grave (puede conllevar una multa de 200€) e incluso puede llevar a la retirada de puntos del carnet de conducir (al menos 4 puntos).
En este punto, es importante estar 100% seguro del adelantamiento a un ciclista y tener en cuenta una serie de consideraciones: mantener la distancia de seguridad establecida, señalizar el adelantamiento con el intermitente (nunca con el claxon que puede asustar al ciclista), adecuar la velocidad en el momento o mirar el estado de la carretera (mirar si hay gravilla o piedras que puedan herir al ciclista).
Uno de los puntos más importantes es evitar el «efecto sumidero», hecho que se produce cuando los vehículos pasan muy cerca del ciclista y esto provoca la pérdida de equilibrio y control de la bicicleta.
Normas para todos
Al igual que los vehículos, los ciclistas también tienen que cumplir una serie de obligaciones durante su conducción:
- No circular en grupo en aquellas zonas donde haya poca visibilidad, con curvas o cambios de rasante.
- Circular siempre por el carril bici o, en su defecto, por el arcén y nunca por autopistas.
- No superar la velocidad máxima permitida de 45km/h aunque, excepto en descensos con curvas, que puede sobrepasarse.
- No circular por el carril VAO (carril de alta ocupación).
- Vigilar siempre aunque tenga preferencia en los giros o rotondas.
- Facilitar en la media de lo posible el adelantamiento del vehículo.
- Llevar las luces encendidas cuando proceda o llevar un chaleco reflectante cuando se circule fuera de la ciudad.
- Nunca conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas. Tampoco llevar auriculares que obstaculicen recibir señales sonoras de otros vehículos.
- Obligatorio llevar sistemas de frenado en ambas ruedas o prescindir de timbre.
- Prohibición de saltarse cualquier norma de seguridad (semáforos, uso de teléfono móvil…)A pesar de que el Artículo 54 del Reglamento General de Circulación permite circular en grupo (no pelotón), extremar la precaución según la vía por la que se circula.
A pesar de que los ciclistas no pueden perder puntos del carnet de conducir (cuando cometen una infracción), tendrán las mismas sanciones en caso de no cumplir con las normas. Desde Tgas abogamos por el respeto, la seguridad y la convivencia entre todos durante la conducción.