
Los trabajadores de una gasolinera están expuestos a una serie de riesgos, en cuanto a los propios componentes tanto de la gasolina como del gasóleo. Ya que la tarea principal de todo empleado consiste básicamente en el suministro de carburante, a través de un surtidor de combustible.
Una labor que requiere el conocimiento de diversas medidas preventivas con el propósito fundamental de evitar percances laborales en las estaciones de servicio (EESS). No obstante, antes de enumerar las medidas, es necesario conocer a qué están expuestos dichos operarios.
Lo cierto es que, aunque en principio no exista contacto directo con el producto (gasolina o gasóleo), la inhalación de vapores procedentes de dicho combustible durante un largo periodo de tiempo, puede acarrear ciertas intoxicaciones leves, anestesia e incluso, afecciones más graves. Además, una exposición intensa a estos carburantes puede provocar mareos o vómitos, así como irritación en los ojos.
Sustancias químicas como el benceno (componente de la gasolina) o el monóxido de carbono, procedente de los gases de escape de los motores de combustión están presentes en el día a día de una gasolinera. Aunque su intensidad depende de las condiciones aplicadas por las EESS (estaciones de servicio), como por ejemplo, es aconsejable recomendar apagar el motor del automóvil a la hora de repostar.
Sin embargo, también existe la posibilidad de que se produzca algún derramamiento o salpicadura de los carburantes líquidos, los cuales pueden entrar en contacto directo con la piel y ocasionar efectos perjudiciales. Es por ello que una vez identificados los factores de riesgo, se deben tomar medidas preventivas para eliminar o reducir la posibilidad de cualquier tipo de percance en las EESS.
La utilización de equipos de seguridad a nivel personal actúa como factor primordial en una gasolinera. Es decir, el uso responsable de los Equipos de Protección Individual (EPI), tales como guantes, fabricados con materiales especiales (Vitón, Nitrilo o PVA); calzado de uso profesional resistentes a combustibles derivados del petróleo; o el empleo de filtros destinados a la protección respiratoria.
También es imprescindible una higiene personal antes, durante y después de manejar el surtidor de combustible. Además, en la zona de trabajo se colocará la correspondiente señalización que alerte del peligro que supone para la seguridad de los trabajadores respirar los vapores de gasolina y del gasóleo.
Conjunto de prevenciones laborales que Tgas cumple bajo la normativa en cada una de sus gasolineras. Ya que desde nuestra empresa estamos al corriente de estos posibles riesgos y sobre todo, velamos por la salud de nuestros trabajadores.